Los barberos en el antiguo Egipto

Los barberos en el antiguo Egipto

Aunque hoy en día podemos encontrar en el mercado infinidad de productos de afeitado clásico, están proliferando cada vez más las barberías, algo que parecía olvidado desde hace unas cuantas décadas y que llevan con nosotros siglos, siendo uno de los trabajos más antiguos de los que se conocen, al menos en cuanto a imagen y estilo se refiere.

El afeitado en el Antiguo Egipto

Aunque ha habido diferentes épocas de la historia en las que los barberos tuvieron una gran importancia, una de las que más fue en el Antiguo Egipcio, donde destacó un barbero en especial, se llamaba Meryma'at.

Fue hace unos 3.300 años aproximadamente cuando desarrolló su labor. Era el encargado de afeitar a los sacerdotes del templo de Amón, algo que tenía que hacer cada tres días. En este caso no solo les afeitaba la barba sino que les rasuraba todo el cuerpo.

Eso respondía a una creencia que tenían los egipcios acerca de que el rasurado completo del cuerpo ayudaba a la pureza de las funciones que debían tener todos los sacerdotes. El problema es que en un principio no se utilizaban cuchillas como usamos hoy en día sino que en los primeros compases se llegaban a utilizar cremas depilatorias basadas en aceites y arena o incluso frotándose piedra pómez, lo que hacía que su piel se irritase.

Finalmente se usaron navajas de cobre, hierro, piedras de sílex muy afiladas o en el mejor de los casos cuchillas hechas con dientes de tiburón según han asegurado algunos historiadores.